Hola, venía a contar un poco mi experiencia, por si le puede servir a alguien.
Yo me apunté a una autoescuela en marzo, dónde hice el teórico y 10 clases prácticas. Aprobé el teórico a la primera en mayo y empecé las prácticas en junio. Durante las prácticas me di cuenta de que el profesor enseñaba a cuentagotas, como si quisiera alargar el tema eternamente. Había clases que acababa con la sensación de no haber aprendido nada, y no porque fuera sobrada, sino porque no me corregía los fallos ni hacíamos cosas nuevas. Cuatros clases en la misma calle en línea recta y otras 6 en la dirección contraria, sin dedicarle atención a los fallos ni a nada en concreto.
Me cambié de autoescuela por ese motivo y desde el primer día noté la diferencia. Cada día nos centramos en una cosa (un día cedas y stop, otro rotondas, otro autovía, aparcamiento, etc) y cuando dimos todo empezamos a hacer rutas de examen. Di 36 clases entre las dos autoescuelas, teniendo en cuenta que en las 10 primeras aprendí poquito y al cambiar de AE tarde dos clases en cogerle el truco al coche nuevo, creo que está bien. Obviamente hay quien se las saca con muchas menos y hay quien más, cada uno tiene sus circunstancias.
El examen se hizo en turnos de dos. Yo iba en el segundo turno y estaba súper nerviosa, pero en cuanto me subí al coche me centré y me calmé. Los dos chicos del primer turno suspendieron por acumulación de leves y el otro por intervención del profesor.
La chica que iba conmigo suspendió por saltarse un stop y casi choca con una moto.
Mi examen fue sencillo, la mayor parte por ciudad, en avenidas grandes con algunas rotondas y glorietas partidas, (zona que nunca había visitado) y otra parte por autovía. Lo que más miedo me daba era que me tocase autovía porque me da miedo la incorporación y normalmente la hago muy lenta, pero fui una valiente y entre a la velocidad que debía jaja. Fue la primera vez que me salió bien la autovía. Después salimos y volvimos a la zona de examen dónde me hizo aparcar sin apagar el motor. Me contó los fallos que fueron 6 leves por observación y señalización tardía o inexistente en algunos momentos, pero vaya, faltas leves. Al inicio nos hizo abrir el capó y nos preguntó por dónde estaba el líquido de frenos y el aceite.

Si habéis llegado hasta aquí (gracias), os diría que vayáis tranquilos, pero eso es imposible. Pensad que si os mandan a examen es porque estáis preparados, confiad en vosotros y poned los cinco sentidos. Realmente es como una práctica más solo que tenéis que hacerla mejor que nunca. Estad atentos a vuestros puntos débiles para recordar las correcciones que os dijo el profesor en su día y seguro que os va bien.
Mucha suerte a todos.