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Un año largo, 6000, a la sexta un apto y flores
Intentaré resumir:
A mis 50 años me ofrecieron un trabajo para el que necesitaba el carnet de conducir. Nunca lo había necesitado (vivía en una gran ciudad) y jamás me habían interesado los coches. Me lo pensé y dije ¿porqué no? En una isla viene muy bien el coche. Elegí una autoescuela pequeña como pude haber elegido otra. En un mes y medio había aprobado el teórico y había comenzado las prácticas (38 pavos la hora). Según el profesor iba muy bien. Mucho ir de una punta a otra de la isla (clase doble), mucho sábado, tan bien que voy "me quiero examinar ya" que llevo 41 prácticas. Me examiné en junio de 2018. Un desastre completo. Cuando bajamos a la ciudad el bajaba todo enfurruñado y yo diciendo que "no sé hacer cuestas ni aparcar", y me quejé de que no había hecho muchos aparcamientos. Quedamos para una siguiente clase en la que quedó en hacer solo aparcamientos. Mala cara, poca paciencia, yo un zote que lio la derecha y la izquierda, un desastre. Tan poco me gustó todo que ya comencé a preguntar por la posibilidad de cambiar de autoescuela. Finalmente me decidí a cambiar por una en la otra punta de la isla, puesto que el examen no se hace en mi ciudad, sino en la otra. Por temas de disponibilidad no pude comenzar hasta el primero de agosto de 2018. Primera clase, me doy cuenta de que en realidad no sé nada, lo primero que me corrige el profesor (un joven lleno de paciencia) es que no giro el volante, no que me agarro a él como una lapa, no, que no lo muevo, con lo cual es normal que pase tantos apuros en los giros. En dos clases fui consciente de que no sabía nada y de que haber hecho un examen con mi total ausencia de dominio del coche había sido una temeridad. Aún recuerdo la cara de mi nuevo profesor cuando me preguntó ¿pero cómo es posible que te subieran a examen? Y yo, es que como iba tan bien yo se lo dije, si tu me dices que voy bien ¿que motivo hay para no subir a examen?... Continuará... Estoy con el móvil y es cansado.
#1-951893
Segunda parte:
En el trabajo esperaron hasta el 16 de agosto, como ya en aquel momento era consciente de que el desaguisado iba a llevar tiempo, informe que era imposible que tuviera el B para septiembre. A lo largo de agosto (a clase diaria) y parte de septiembre se dedicaron de forma exclusiva a quitar todos los automatismos que había adquirido de hacer 40 km de ida y 40 de vuelta agarrada a un volante con un tipo que iba conduciendo por mi.
Las nuevas clases, de 45 min en vez de una hora, cundian de forma increíble, ciudad, algo de carretera y un par de aparcamientos. Después fueron tiempos de pocas prácticas y falta de fluidez. En diciembre, antes de caducar convocatoria, me examiné, suspendí (rotondas mi bestia negra) y a renovar. La tercera en febrero volví a suspender, y la cuarta me suspendió porque no le di seguridad al examinador. Pero he de decir que fue mi mejor examen. En estas ya era consciente de que mi problema no era torpeza, sino simplemente miedo. Me recomendaron las flores de Basch, reskiu para antes de coger el coche. Y si, comencé a hacer las prácticas con esa ayuda, y flipante porque por primera vez la cosa fluyó. Yo disfrute conduciendo y mi profe estaba encantado con mi nuevo ánimo. Las flores me han ayudado a automatizar cosas que me daban miedo, pero que he superado y ahora hago bien. Renové papeles, suspendí una quinta vez muy merecidamente, por cierto, (si hubiese topado un barco con el montacargas abierto me los habría llevado de juerga a Ibiza) y aprobé a la sexta. No fue mi mejor examen, pero después de un comienzo catastrófico que todos decidimos obviar me dieron el apto a principios de julio. Hace unos días me dejaron un coche y llevé a unas amigas a un concierto. Todo fenomenal aunque tardé en aparcar, como siempre tardo cuando tengo mucho sitio. Pero el coche quedó niquelado. Esta es un poco mi estrombotica experiencia con el coche. Ánimo a todos.
#2-951894
Felicidades !!!
#3-951900
Hay un examinador en Madrid, q siempre dice lo mismo,.
Mi madre es una santa, yo no soy un hijo puta. Yo soy examinador como tu padre, puede ser taxista a piloto.
La culpa la tienen siempre los demás, el profesor, el examinador, los demás q no saben conducir ect. Pero nunca habrás oído al alumno q la culpa es suya.....
Todos quieren dar el mismo número de clases. Como si todos tuviéramos las misma nota en inglés, o jugará os igual al padel.
Por lo visto para conducir, todos son iguales......
Hay lo dejo. Cada uno q saque sus consecuencias
#4-951914
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