Como veo que ningún profe te contesta, te doy mi opinión.
En primer lugar, cuando se conduce es muy importante anticiparse a situaciones potencialmente complicadas. Por esa razón, hay que mirar a lo lejos, además de cerca, para ver los peligros con tiempo y llegar a una velocidad adecuada y poder reaccionar bien. En este sentido, cuando vemos a venir un paso de peatones debemos moderar la velocidad antes de llegar para no tener que frenar bruscamente. Si vas por ciudad a 50, deberías dejar de acelerar e ir frenando antes, no llegues a 50 a un paso de peatones, cuando lo tengas muy frenado, pisa el embrague a fondo.
El medio embrague lo utilizas cuando sales porque no conviene soltarlo de golpe o bien en un giro muy cerrado junto con el freno pisas el embrague y lo vas soltando. Pero el medio embrague fuera de estas situaciones lo perjudica.
Ten en cuenta que en bajada con primera el embrague acelera, puedes perder el control porque se embala, debes cambiar a segunda en seguida y levantar embrague. En cambio, en un giro cerrado en llano sí te ayuda a frenar. Hay que usarlo en su debido momento. Eso se aprende con el tiempo y la práctica.
Por lo general, del embrague no hay que abusar, no hay que emplearlo para frenar con el freno por ir demasiado rápido. En algunas circunstancias, para evitar un accidente, si es inevitable, pisas freno y embrague y funciona ABS, entonces el auto frena de golpe. Por supuesto, con prudencia y prevención podemos ahorrarnos estas frenadas forzadas, por el bien de nuestras cervicales, de la mecánica del coche y los demás conductores y peatones que comparten la via.
Espero haberte ayudado.